PERTENECE A LA PÁGINA WIX LITERATURA UNIVERSAL. MONSERRAT MUNTANÉ
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1. MESOPOTAMIA
2. LITERATURA EGIPCIA
3. LITERATURA INDIA
TEXTOS
Texto 2: Noé
y el Diluvio Universal
Y dijo
entonces Dios a Noé;
—Hazte un arca de madera de ciprés.
Divídela en compartimientos y prepárala para que pueda flotar sobre las aguas.
Éstas serán sus dimensiones: ciento cincuenta metros de largo, veinticinco de
ancho y quince de alto. Yo voy a enviar sobre la tierra un diluvio de agua
para destruir a todo ser viviente bajo el cielo: todo lo que respira se
ahogará. Contigo, en cambio, estableceré un pacto y lo respetaré. Entra en el
arca con tu mujer, tus hijos y sus mujeres. Mete contigo también en el arca un
macho y una hembra de cada una de las especies que viven y respiran sobre la
tierra, para que sobrevivan contigo. Y, por tu parte, procura hacer provisión
de todo aquello que pueda serviros de alimento tanto a ti como a los animales.
Noé
cumplió exactamente todo lo que Dios le había ordenado. Los demás hombres se
reían de él al verle construir la barca. Pero él se mantenía firme en el pacto
que había hecho con Dios.
Cuando
acabó de construir la barca, hizo entrar en ella a su familia. Y vio también
cómo una pareja de cada especie animal se dirigía hacia la embarcación, en la
que él había almacenado ya comida para una larga temporada.
Era el
año seiscientos de la vida de Noé cuando Dios abrió las compuertas del cielo y
comenzó a llover sin parar. Y sobre la tierra cayó un diluvio de agua que duró
cuarenta días y cuarenta noches.
En cuanto
las aguas crecieron y subieron de nivel, levantaron en alto el arca, que
flotaba sobre la tierra. Todas las montañas quedaron cubiertas de agua, y por
encima de los picos más altos había todavía siete metros de agua. Tocios tos animales, pájaros y personas
murieron ahogados o por falta de alimentos. Sólo Noé y los que estaban con él
en el arca pudieron sobrevivir.
La tierra
quedó cubierta por las aguas durante mucho tiempo. Hasta que Dios se acordó de
Noé y de todos los animales que estaban con él en el arca. Hizo pasar un viento
sobre la tierra y bajaron las aguas. Se cerraron las fuentes del abismo y las
compuertas del cielo y cesó de caer lluvia. Al cabo de ciento cincuenta días
las aguas comenzaron a bajar, y el día diecisiete del séptimo mes el arca
quedó anclada en la cumbre de las montañas de Ararat, en Armenia. Las aguas
continuaron bajando hasta el mes décimo y fueron apareciendo las cimas de los
montes.
Al cabo
de cuarenta días, Noé abrió la ventana del arca y soltó un cuervo, que estuvo
volando, yendo y viniendo, porque las aguas aún lo cubrían todo. Después soltó
una paloma para ver si se habían secado las aguas sobre la superficie de la
tierra. Pero la paloma no encontró un lugar donde posarse y volvió al arca.
Esperó siete días más y de nuevo soltó la paloma, que volvió el mismo día por
la tarde, trayendo en su pico una rama verde de olivo acabada de arrancar. Noé
comprendió entonces que las
aguas habían bajado ya. Esperó siete días más y soltó otra vez la paloma, que
ya no volvió.
El año
seiscientos uno de la vida de Noé, el día uno del primer mes, se secaron las
aguas sobre la superficie de la tierra. Noé levantó la cubierta del arca, miró
y vio que la superficie de la tierra estaba
seca. El día veintisiete del segundo mes, Noé salió del arca. Hacía algo más de
un año que había empezado el diluvio.
Nada más salir del
arca, Noé, junto con toda su familia, le ofreció un sacrificio a Dios. El Señor
se complació en el agradable perfume del sacrificio y dijo:
-“Nunca más volveré a maldecir la
tierra por culpa de los hombres, a pesar de su inclinación hacia el mal”.
Noé,
con sus tres hijos y sus esposas, repobló la tierra. Él mismo cultivó los
campos y plantó una viña. Un día bebió de su vino, se emborrachó y se quedó
desnudo en el interior de la tienda. Cam, su hijo, al verlo, corrió a decírselo
a sus hermanos que estaban fuera. En cambio, Sem y Jaiet taparon a su padre con
un manto. Cuando Noé despertó y supo lo que había hecho Cam, le maldijo, a él y
a su hijo Canaán y a toda su descendencia.
Noé vivió todavía muchos,
muchísimos años. Y sus tres hijos, Sem, Cam y Jafet se dispersaron por toda la
tierra y la poblaron.
génesis (I. 6-8)
1. ¿Cómo era el universo
antes de que Dios ordenara en él las cosas? ¿Cuál es el primer elemento ordenador?
2. ¿Por Qué se dice que el
Génesis es una cosmogonía?
3. Lee otros episodios del
Antiguo Testamento y resúmelos oralmente en clase.
5. En el D.R.A.E. aparece la
palabra «babel». Consulta su significado y explica el episodio bíblico en que
se basa. Haz lo mismo con la palabra «apocalipsis
6. Uno de los libros del
Antiguo Testamento es el de Job. ¿Con qué virtud o cualidad se identifica el
nombre de este personaje?
7. ¿Recuerdas alguna película
de asunto bíblico? Cuéntala oralmente ante tus compañeros y compañeras.
Texto 3:
Cantar de los Cantares
ELLA. ¡Una voz!...
¡Es mi amor!
He aquí que ya llega
saltando por los
montes,
brincando por los
collados.
Semejante es mi amor
a una gacela,
a un ágil cervatillo.
Vedlo ya aquí
apostado
detrás de nuestra
cerca.
Mira por las
ventanas,
espía por las
celosías.
Mi amor canta y me
dice:
ÉL. «¡Levántate, amor mío;
hermosa mía, ven!
Porque, mira, ha
pasado el invierno,
ha cesado la lluvia y
ya se ha ido.
Han nacido las flores
en la tierra,
ha llegado el tiempo
de la poda;
ya la voz de la
tórtola se siente en nuestra tierra.
La higuera echa las
yemas de sus higos,
las viñas en flor
exhalan su perfume.
¡Levántate, amor mío;
hermosa mía, ven!
Paloma mía, en las
grietas de las peñas,
en escarpados
escondrijos,
muéstrame tu rostro,
déjame oír tu voz,
porque tu voz es
dulce
y tu rostro
encantador.»
ELLA. Mi amado es
mío y yo soy suya.
Él apacienta su rebaño entre los lirios.
Mientras sopla la
brisa del día
y las sombras se
desvanecen,
vuelve, amor mío;
sé como la gacela
o el joven cervatillo
La doctrina de Confucio se puede resumir en
una serie de reglas que deben ser cumplidas por todos los gobernantes
1.
Amar al pueblo, renovarlo moralmente y
procurarle los medios necesarios para la vida cotidiana.
2.
Por este motivo, debe servirse en
primer término con soberano respeto a Aquel que es el Primer Dominador.
3.
Cultivar la virtud personal y tender
sin cesar a la perfección.
4.
En la vida privada como en la pública,
observar siempre el sendero superior del “Justo Medio”.
5.
Tener en cuenta las dos clases de
inclinación propias del hombre: unas proceden de la carne y son peligrosas;
las otras pertenecen a la razón y son muy sutiles y fáciles de perder.
6.
Practicar los deberes de las cinco
relaciones sociales (explicadas más abajo).
7.
Tener por objeto final la paz
universal y la armonía general.
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MÁXIMAS:
- “Leer sin meditar es
una ocupación inútil"
- "El hombre
superior gusta de ser lento en palabras, pero rápido en obras"
- "El mejor
indicio de la sabiduría es la concordancia entre las palabras y las
obras"
- “El hombre más noble
es digno, pero no orgulloso; el inferior es orgulloso pero no es digno”
- “Transporta un puñado
de tierra todos los días y construirás una montaña”
- "Nuestra mayor
gloria no está en no caer jamás, sino en levantarnos cada vez que
caigamos"
- "Esperar lo
inesperado. Aceptar lo inaceptable"
- "Exígete mucho a
ti mismo y espera poco de los demás. Así te ahorrarás disgustos"
- "Estudia el
pasado para pronosticar el futuro"
- "Lo prudente no
quita lo valiente."
- "El hombre sabio
busca lo que desea en su interior; el no sabio, lo busca en los
demás"
- "No hagas a
otros lo que no quieres que te hagan a ti, ni te hagas a ti lo que no le
harías a los demás "
- "El campo es la
fuente de toda la riqueza humana."
- "No te rindas
nunca si quieres volver a casa"
- "Ser como el
sándalo que perfuma el hacha que lo corta"
- "Oigo y olvido.
Veo y recuerdo. Hago y comprendo"
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LAO TSE:
Mientras el confucionismo exhortaba a los hombres a someterse a
las normas de un sistema social ideal, el taoísmo sostenía que el individuo ha
de ignorar los dictados de la sociedad para someterse sólo a las pautas del
Universo, el Tao( camino), que no se puede ni describir con palabras ni
concebir con el pensamiento. Para estar de acuerdo con el tao, no hace falta
hacer nada ni forzado, ni artificial, ni natural. A través de obedecer
espontáneamente los impulsos de la naturaleza propia de cada uno y de abandonar
las doctrinas y conocimientos mundanos, se llega a la unidad con el tao y de
ello deriva el poder místico. Este poder permite trascender todas las
distinciones mundanas, incluso la vida y la muerte. Para conseguir este estado
de paz que permite al hombre reencontrarse con la naturaleza, los taoístas
reivindican el retorno a la naturaleza, a la vida agraria primitiva.